Las autoridades de salud del Cesar confirmaron la muerte de cinco hermanos menores de edad de la etnia yukpas del resguardo indígena Iroka, zona rural del municipio de Codazzi, que habrían consumido una fruta venenosa que proviene de la palma.

Tres de los menores, entre los 3 y 13 años de edad, murieron en el lugar de los hechos, mientras que los otros dos alcanzaron a ser atendidos en la Clínica Codazzi.

El secretario de Salud, Juan Carlos Mindiola, informó además que la alerta fue lanzada por indígenas que el sábado se presentaron en la Clínica Codazzi con dos de los niños en estado grave y que luego fallecieron cuando eran atendidos.

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“El día de ayer recibimos la noticia del fallecimiento de 5 niños de la misma familia, 3 de ellos fallecieron en el sitio y dos fueron trasladados hacia la clínica Sermultisalud del municipio de Agustín Codazzi donde fallecieron”, añadió.

Las autoridades también tratan de verificar si los cinco hermanos, tres niñas y dos niños, se habrían solos en el resguardo sin la supervisión de otros adultos.

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Familiares narraron que quedaron bajo el cuidado del padre que se habría ausentado de la vivienda, mientras que la madre había llevado al médico a otro de sus hijos en Valledupar por problemas de salud.

El funcionario dijo además que un equipo de epidemiología fue enviado a la zona de la Serranía del Perijá para verificar los hechos.